Epilepsia y embarazo
La epilepsia es un trastorno crónico o un grupo de trastornos
caracterizados por convulsiones recurrentes e impredecibles. Una convulsión es
una disfunción fisiológica temporal del cerebro, en la que las neuronas
producirán una descarga eléctrica excesiva. Debido a que es una condición
crónica, muchas mujeres quieren saber sobre la epilepsia durante el embarazo y
cómo puede afectar a su bebé.
¿Cuáles son los síntomas de la epilepsia durante el embarazo?
Desafortunadamente, algunos de los síntomas de la epilepsia son similares a
los síntomas del embarazo.
Aquí hay un vistazo rápido a algunos de los síntomas de la epilepsia:
- Dolor de cabeza
- Cambios en el estado de ánimo o los niveles de energía
- Mareo
- Desmayo
- Confusión
- Pérdida de memoria
¿Cambiará mi epilepsia durante el embarazo?
La razón probable del aumento de las convulsiones son los medicamentos
anticonvulsivos. Los medicamentos anticonvulsivos tienden a funcionar de manera
diferente durante el embarazo y, como resultado, su médico podría ver la
necesidad de cambiar su medicamento durante el embarazo.
También existe la dificultad añadida de las náuseas, que pueden hacer que
el medicamento se vomite antes de que el cuerpo pueda absorberlo adecuadamente.
¿La epilepsia durante el embarazo afecta a mi bebé?
El tipo de convulsión que experimente con su epilepsia puede causar
diferentes grados de complicaciones. Si experimenta convulsiones parciales o de
ausencia, el riesgo para el bebé es mínimo. Si sufre una forma de convulsión tónico-clónica,
aumenta el riesgo de lesiones para el bebé y la madre.
Durante una convulsión tónico-clónica, hay una interrupción temporal de la
respiración; aunque esta interrupción rara vez afecta a la madre, puede llevar
a la privación de oxígeno en su bebé. Además, la frecuencia cardíaca de su bebé
puede disminuir hasta 30 minutos después de una convulsión tónico-clónica.
Esta forma de convulsión también aumenta el riesgo de traumatismo para el
bebé. Las convulsiones tónico-clónicas presentan el mayor riesgo durante el
último trimestre cuando el cerebro del bebé es más grande y necesita más
oxígeno.
¿Cuáles Son Los Riesgos De La Epilepsia Durante El Embarazo?
La epilepsia puede afectar el embarazo de varias maneras. Si ocurren
convulsiones durante el embarazo, pueden ocurrir una serie de complicaciones
que afectan al bebé, entre ellas:
- Desaceleración de la frecuencia cardíaca fetal
- Lesión fetal
- Separación prematura de la placenta del útero.
- Aborto espontáneo debido a un trauma experimentado durante las convulsiones.
- Trabajo prematuro
- Nacimiento prematuro
Medicamentos anticonvulsivos durante el embarazo
Una de las principales preocupaciones de las futuras madres con epilepsia
es el efecto que el medicamento puede tener en el bebé. Las mujeres epilépticas
tienen entre un 4 y un 6 % de posibilidades de tener un bebé con un defecto
congénito como resultado de tomar medicamentos anticonvulsivos. Algunos son
defectos leves, como pequeños dedos de las manos y uñas de los pies, que es
probable que su bebé desaparezca.
Sin embargo, existen más defectos congénitos importantes, como espina
bífida, labio leporino, defectos del tubo neural y anomalías cardíacas. Debe
consultar a su médico acerca de su medicación anticonvulsivante cuando intente
quedar embarazada. Es posible que le recomienden cambiar su medicamento o
reducir la dosis de su medicamento actual.
Bajo ninguna circunstancia debe dejar de tomar su medicamento sin consultar
a un médico.
Medidas de precaución
Hay pasos que se deben tomar si usted es epiléptico y quiere asegurar el
embarazo más saludable posible. El asesoramiento previo a la concepción debe
realizarse con un médico antes de quedar embarazada. Su médico revisará su
historial médico para determinar si es necesario un cambio en su medicamento anticonvulsivo.
Cuando tome medicamentos anticonvulsivos, debe hablar con su médico acerca
de tomar ácido fólico.
Tomar ácido fólico antes y durante el embarazo puede mejorar la salud de su
bebé. Los medicamentos anticonvulsivos pueden interferir con los niveles de
ácido fólico en el cuerpo, y los niveles bajos de ácido fólico pueden provocar
defectos del tubo neural. Los estudios han demostrado que tomar ácido fólico
durante los primeros tres meses de embarazo disminuye el riesgo de espina
bífida.
Sin embargo, siempre es importante consultar a su médico antes de tomar
ácido fólico, ya que puede interactuar con algunos medicamentos
anticonvulsivos, haciéndolos menos efectivos y aumentando sus posibilidades de
sufrir una convulsión.
Qué hacer después del parto
El trabajo de parto y el nacimiento pueden ejercer una gran cantidad de
estrés en el cuerpo que afecta la salud y el bienestar de la madre. Los
estudios han demostrado que durante los dos días posteriores al nacimiento del
bebé, las mujeres con epilepsia tienen más probabilidades de sufrir una
convulsión.
Los factores que contribuyen a por qué esto puede ocurrir incluyen:
- La privación del sueño
- Hiperventilación
- Estrés
- Dolor físico
- Fracaso/incapacidad de las mujeres para tomar medicamentos
Es importante que la madre descanse lo suficiente, permanezca libre de
estrés y tome sus medicamentos según lo prescrito por su médico. Obtener ayuda
de familiares y amigos o usar una doula posparto son algunas formas de reducir
el estrés.
¿Puedo amamantar si soy epiléptica?
Un gran número de mujeres con epilepsia se animan a amamantar, debido a los numerosos beneficios de la leche materna para el bebé. Sin embargo, siempre es importante hablar con su médico para sopesar los beneficios de amamantar contra el uso de medicamentos anticonvulsivos por parte de la madre.