Herpes genital
El herpes genital, también conocido como virus del herpes simple, es una
infección viral que afecta a casi 1 600 000 personas nuevas cada año.
¿Cuáles son los síntomas?
En la mayoría de los casos, no suele haber síntomas. Muchas personas tienen
herpes y no lo saben. Algunas personas experimentan ampollas dolorosas o llagas
alrededor del área genital (HSV-2).
¿El herpes genital puede conducir a otros problemas?
No hay cura, lo que significa que una vez que la contraes, es una infección
de por vida. El herpes genital te hace más susceptible al VIH. Algunas personas
experimentan ampollas o llagas que reaparecen a lo largo de los años. Se puede
contagiar a un bebé durante el embarazo o el parto y provocar problemas de
salud graves.
¿Cómo se transmite?
El herpes genital se transmite por contacto de piel a piel, que en la
mayoría de los casos se produce a través de la actividad sexual, incluidas las
relaciones sexuales orales, anales y vaginales. Puede transmitirse incluso si
alguien no tiene llagas o ampollas visibles. El HSV-1, el virus del herpes que
normalmente causa llagas en la boca o en los labios, puede propagarse de la
boca al área genital a través del sexo oral.
Existen principalmente dos formas diferentes de transmisión del herpes
genital:
- Actividad sexual que incluye coito oral, anal, vaginal
- Madre a bebé durante el embarazo o el parto
¿Cómo se diagnostica?
El herpes genital puede ser diagnosticado por su médico. Se diagnostica por
una de tres maneras:
- Examen pélvico
- Cultivo de ampollas o llagas si las hay
- Análisis de sangre (normalmente no se hace)
¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
Actualmente, no hay cura; sin embargo, existen medicamentos que se pueden
usar para controlar los síntomas y disminuir la frecuencia de los brotes.
¿Se puede prevenir el herpes genital?
Solo hay dos formas de prevenir el herpes genital. El primero es abstenerse de cualquier tipo de contacto sexual. La segunda es estar en una relación monógama a largo plazo, como el matrimonio, con una persona que no ha tenido otras parejas sexuales. El uso de preservativos reduce el riesgo de transmisión del herpes genital, pero no lo previene. Existe un 40% de riesgo de reducción mediante el uso de preservativos.