¿Qué es el autismo?
El autismo, también llamado
trastorno del espectro autista, es una condición complicada que incluye
problemas de comunicación y comportamiento. Puede involucrar una amplia gama de
síntomas y habilidades. El trastorno del espectro autista puede ser un problema
menor o una discapacidad que requiere atención de tiempo completo en un centro
especial.
Las personas con autismo
tienen problemas para comunicarse. Tienen problemas para comprender lo que
piensan y sienten otras personas. Esto les dificulta expresarse, ya sea con
palabras o mediante gestos, expresiones faciales y tacto.
Las personas con autismo
pueden tener problemas de aprendizaje. Sus habilidades pueden desarrollarse de
manera desigual. Por ejemplo, podrían tener problemas para comunicarse pero ser
excepcionalmente buenos en arte, música, matemáticas o memoria. Debido a esto,
es posible que les vaya especialmente bien en pruebas de análisis o resolución
de problemas.
Más niños son diagnosticados
con autismo ahora que nunca. Pero las últimas cifras podrían ser más altas
debido a cambios en la forma en que se diagnostica, no porque más niños tengan
un trastorno.
Signos y síntomas del autismo
Los síntomas del autismo
generalmente aparecen antes de que el niño cumpla 3 años. Algunas personas muestran
signos desde el nacimiento.
Los síntomas comunes del
autismo incluyen:
- Falta de contacto visual
- Un rango limitado de intereses o un interés intenso en ciertos temas.
- Hacer algo una y otra vez, como repetir palabras o frases, balancearse hacia adelante y hacia atrás o mover una palanca.
- Alta sensibilidad a sonidos, toques, olores o imágenes que parecen normales para otras personas.
- No mirar ni escuchar a otras personas
- No mirar las cosas cuando otra persona las señala.
- No querer ser abrazado o abrazado
- Problemas para comprender o usar el habla, los gestos, las expresiones faciales o el tono de voz.
- Hablar con voz cantarina, plana o robótica
- Dificultad para adaptarse a los cambios en la rutina.
Algunos niños con autismo
también pueden tener convulsiones. Es posible que estos no comiencen hasta la
adolescencia.
Desórdenes del espectro autista
Alguna vez se pensó que
estos tipos eran condiciones separadas. Ahora, caen dentro de la gama de
trastornos del espectro autista. Incluyen:
- Síndrome de Asperger. Estos niños no tienen problemas con el lenguaje; de
hecho, tienden a obtener puntajes en el rango promedio o por encima del
promedio en las pruebas de inteligencia. Pero tienen problemas sociales y un
ámbito de intereses limitado.
- Trastorno autista. Esto es lo que la mayoría de la gente piensa cuando
escuchan la palabra "autismo". Se refiere a problemas con las
interacciones sociales, la comunicación y el juego en niños menores de 3 años.
- Trastorno desintegrativo infantil. Estos niños tienen un desarrollo típico durante al
menos 2 años y luego pierden parte o la mayoría de sus habilidades sociales y
de comunicación.
- Trastorno generalizado del desarrollo. Su médico puede usar este término si su hijo tiene
algún comportamiento autista, como retrasos en las habilidades sociales y de
comunicación, pero no encaja en otra categoría.
Causas del autismo
No está claro exactamente
por qué ocurre el autismo. Podría deberse a problemas en partes de su cerebro
que interpretan la información sensorial y procesan el lenguaje.
El autismo es cuatro veces
más común en los niños que en las niñas. Puede suceder en personas de cualquier
raza, etnia o origen social. Los ingresos familiares, el estilo de vida o el
nivel educativo no afectan el riesgo de autismo de un niño.
El autismo es hereditario,
por lo que ciertas combinaciones de genes pueden aumentar el riesgo de un niño.
Un niño con un padre mayor
tiene un mayor riesgo de autismo.
Si una mujer embarazada está
expuesta a ciertas drogas o sustancias químicas, como el alcohol o los
medicamentos anticonvulsivos, es más probable que su hijo sea autista. Otros
factores de riesgo incluyen afecciones metabólicas maternas como diabetes y
obesidad. La investigación también ha relacionado el autismo con la
fenilcetonuria y la rubéola no tratadas.
No hay evidencia de que las
vacunas causen autismo.
Detección y diagnóstico del autismo
Puede ser difícil obtener un
diagnóstico definitivo de autismo. Su médico se centrará en el comportamiento y
el desarrollo.
En el caso de los niños, el
diagnóstico suele tomar dos pasos.
- Una evaluación del desarrollo le dirá a su médico si su hijo está bien encaminado con las habilidades básicas como aprender, hablar, comportarse y moverse. Los expertos sugieren que los niños sean examinados para detectar estos retrasos en el desarrollo durante sus chequeos regulares a los 9 meses, 18 meses y 24 o 30 meses de edad. Los niños son examinados de forma rutinaria específicamente para detectar autismo en sus controles de 18 y 24 meses.
- Si su hijo muestra signos de un problema en estos exámenes, necesitará una evaluación más completa. Esto podría incluir pruebas de audición y visión o pruebas genéticas. Es posible que su médico desee contratar a alguien que se especialice en trastornos del autismo, como un pediatra del desarrollo o un psicólogo infantil.
Si no le diagnosticaron
autismo cuando era niño, pero nota que muestra signos o síntomas, hable con su
médico.
Tratamiento del autismo
No existe cura para el
autismo. Pero el tratamiento temprano puede marcar una gran diferencia en el
desarrollo de un niño con autismo. Si cree que su hijo muestra síntomas del
trastorno del espectro autista, informe a su médico lo antes posible.
Lo que funciona para una
persona puede no funcionar para otra. Su médico debe adaptar el tratamiento
para usted o su hijo. Los dos tipos principales de tratamientos son:
Terapia conductual y de
comunicación para ayudar con la estructura y la organización. El análisis de
comportamiento aplicado es uno de estos tratamientos; promueve el
comportamiento positivo y desalienta el comportamiento negativo. La terapia
ocupacional puede ayudar con habilidades para la vida como vestirse, comer y
relacionarse con las personas. La terapia de integración sensorial puede ayudar
a alguien que tiene problemas para ser tocado o con imágenes o sonidos. La
terapia del habla mejora las habilidades de comunicación.
Medicamentos para ayudar con
los síntomas del trastorno del espectro autista, como problemas de atención,
hiperactividad o ansiedad.
Hable con su médico antes de
probar algo diferente, como una dieta especial.