Presentación de nalgas
La mayoría de los bebés se moverán a la posición de parto unas semanas
antes del nacimiento, con la cabeza acercándose al canal de parto. Cuando esto
no suceda, las nalgas y/o los pies del bebé se colocarán para salir primero.
Esto se conoce como “presentación de nalgas”.
Los nacimientos de nalgas ocurren en aproximadamente 1 de cada 25
nacimientos a término.
¿Cuáles son los diferentes tipos de presentación de nalgas?
- Nalgas completa: aquí, las nalgas
apuntan hacia abajo con las piernas dobladas a la altura de las rodillas y los
pies cerca de las nalgas.
- Nalgas francas: en esta posición, las
nalgas del bebé apuntan hacia el canal de parto con las piernas pegadas hacia
arriba frente a su cuerpo y los pies cerca de la cabeza.
- Nalgas incompleta : en esta posición, uno
o ambos pies del bebé apuntan hacia abajo y saldrán antes que el resto del
cuerpo.
¿Qué causa una presentación de nalgas?
Las causas de las presentaciones de nalgas no se comprenden completamente.
Sin embargo, los datos muestran que el parto de nalgas es más común:
- En embarazos posteriores
- En embarazos de múltiples
- Cuando hay antecedentes de parto prematuro
- Cuando el útero tiene demasiado o muy poco líquido amniótico
- Cuando hay un útero de forma anormal o un útero con crecimientos anormales, como fibromas
- Con mujeres que tienen placenta previa
¿Cómo se diagnostica una presentación de nalgas?
Unas semanas antes de la fecha de parto, el médico colocará las manos en la
parte inferior del abdomen de la madre para ubicar la cabeza, la espalda y las
nalgas del bebé. Si parece que el bebé podría estar en posición de nalgas,
pueden usar ultrasonido para confirmar la posición.
También se pueden usar radiografías especiales para determinar la posición
del bebé y el tamaño de la pelvis para determinar si se puede intentar con
seguridad un parto vaginal de un bebé de nalgas.
¿Puede una presentación de nalgas significar que algo anda mal?
Aunque la mayoría de los bebés que nacen de nalgas nacen sanos, existe un
riesgo ligeramente elevado de ciertos problemas. Los defectos de nacimiento son
un poco más comunes en los bebés de nalgas y el defecto podría ser la razón por
la que el bebé no se movió a la posición correcta antes del parto.
¿Se puede cambiar una presentación de nalgas?
Es preferible tratar de convertir a un bebé de nalgas entre las semanas 32
y 37 de embarazo. Los métodos para convertir a un bebé variarán y la tasa de
éxito de cada método también puede variar. Lo mejor es discutir las opciones
con el médico para ver qué método recomienda.
Técnicas Médicas
Versión Externa: La versión externa es una técnica no quirúrgica para mover
al bebé en el útero. En este procedimiento, se administra un medicamento para
ayudar a relajar el útero. También podría existir el uso de un ultrasonido para
determinar la posición del bebé, la ubicación de la placenta y la cantidad de
líquido amniótico en el útero.
Empujar suavemente la parte inferior del abdomen puede hacer que el bebé
quede boca abajo. A lo largo de la versión externa, se controlarán de cerca los
latidos del corazón del bebé para que, si se desarrolla un problema, el médico
detenga inmediatamente el procedimiento. La versión externa tiene una alta tasa
de éxito. Sin embargo, este procedimiento se vuelve más difícil a medida que se
acerca la fecha de vencimiento.
Técnicas Naturales
Las siguientes técnicas sin riesgo, a menudo sugeridas por la
fisioterapeuta Penny Simkin, se pueden probar en casa de forma gratuita:
- La inclinación de nalgas: Usando almohadas
grandes y firmes, levante las caderas 12″ o 30 cm del suelo durante 10-15
minutos, tres veces al día. Es mejor hacer esto con el estómago vacío cuando su
bebé está activo. En esta técnica trata de concentrarte en el bebé sin tensar
tu cuerpo, sobre todo en la zona abdominal.
- Uso de la música: sabemos que los bebés
pueden escuchar sonidos fuera del útero. En consecuencia, muchas mujeres han
usado música o grabaciones de su voz para intentar que su bebé se mueva hacia
el sonido. Colocar auriculares en la parte inferior de su abdomen y reproducir
música o sonidos de su voz puede alentar a los bebés a moverse hacia los
sonidos y salir de la posición de nalgas.
¿Parto vaginal versus cesárea por parto de nalgas?
La mayoría de los médicos no creen en intentar un parto vaginal en posición
de nalgas. Sin embargo, algunos retrasarán la toma de una decisión final hasta
que la mujer esté de parto.
Las siguientes condiciones se consideran necesarias para intentar un parto
vaginal:
- El bebé está a término y en presentación franca de nalgas.
- El bebé no muestra signos de angustia mientras se controla de cerca su frecuencia cardíaca.
- El proceso de trabajo de parto es suave y constante, y el cuello uterino se ensancha a medida que el bebé desciende.
- El médico estima que el bebé no es demasiado grande ni la pelvis de la madre demasiado estrecha para que el bebé pase con seguridad por el canal de parto.
- La anestesia está disponible y es posible un parto por cesárea con poca antelación
¿Cuáles son los riesgos y complicaciones de un parto vaginal?
En un parto de nalgas, la cabeza del bebé es la última parte de su cuerpo
en emerger, lo que dificulta el paso del bebé por el canal de parto. A veces se
usan fórceps para sacar la cabeza del bebé del canal de parto. Otro problema
potencial es el prolapso del cordón.
En esta situación, el cordón umbilical se aprieta a medida que el bebé se
mueve hacia el canal de parto, lo que reduce el suministro de oxígeno y sangre
al bebé. En un parto vaginal de nalgas, se utilizará un control fetal
electrónico para controlar los latidos del corazón del bebé durante el
transcurso del trabajo de parto. El parto por cesárea puede ser una opción si
se desarrollan signos de que el bebé puede estar angustiado.
¿Cuándo se usa un parto por cesárea con una presentación de nalgas?
La mayoría de los médicos recomiendan un parto por cesárea para todos los
bebés en posición de nalgas, especialmente los bebés prematuros. Dado que los
bebés prematuros son pequeños y más frágiles, y debido a que la cabeza de un
bebé prematuro es relativamente más grande en proporción a su cuerpo, es poco
probable que el bebé estire el cuello uterino tanto como un bebé nacido a
término. Esto significa que podría haber menos espacio para que emerja la
cabeza.